Antes de decidirte hacerte un piercing debes pensar la zona en la que te gustaría hacértelo. Piensa que, entre las más comunes, destacan los labios, la nariz, el ombligo o las cejas pero, actualmente, hay otras muchas partes del cuerpo susceptibles a llevar un pendiente: el frenillo, la lengua, los pezones, etcétera.
Así pues, lo primero es decidir la zona que quieres perforarte. Nuestros profesionales te asesoraran en todo momento y resolveran todas tus dudas.